Presentación Conjunto
La ciudad de Baelo Claudia nace en el s. II a.C. en una zona altamente estratégica como lo es el Estrecho de Gibraltar. Su origen y posterior evolución están muy ligados al desarrollo de las industrias salazoneras y al comercio con el norte de África, siendo puerto de unión con la actual Tánger.
Sobre el cambio de era se inicia un proceso de desarrollo urbanístico que culminará en la 1º mitad del s. II d.C. con la construcción de un amplio foro monumental, edificios lúdicos y un destacado complejo salazonero, verdadero motor económico de la ciudad. Es en este período cuando Baelo recibirá el apelativo de Claudia, promocionando a municipio romano y disfrutando así la ciudad del período de prosperidad más importante de su historia.
La ciudad de Baelo entrará en un proceso de decadencia progresivo que se iniciará a mediados del s. II d.C., seguramente precipitado por el terremoto que asoló la ciudad en el s. III d.C., y tras una paulatina regresión culminará con el abandono poblacional de la ciudad hacia el s. VII d.C.
Baelo Claudia representa un claro referente para el conocimiento del urbanismo romano y la vida en una ciudad durante el Imperio Romano, ya que aquí se localizan todos los elementos representativos que constituyen la esencia de una ciudad romana, es decir: el foro, los templos, la basílica, los edificios de carácter administrativo como la curia o el archivo, el mercado, el teatro, las termas, el barrio industrial, acueductos, la muralla completa, etc.