Obras Singulares
La última ola (Naufragio)
Emilio Ocón y Rivas (1845-1904)
Óleo sobre lienzo
250 x 224 cm
1893
Procedencia
Museo de Arte Moderno
Comentario
Extraordinaria marina del malagueño Emilio Ocón, una poderosa composición que nos acerca a la tragedia en el mar, al sobrecogedor momento en el que los supervivientes de un naufragio luchan por conseguir llegar a tierra y salvar sus vidas.
Pintor de marinas adscrito al realismo, fue maestro y figura esencial en la creación de la escuela marinista en Málaga. Ocón trabajaba del natural directamente de los lugares que pintaba, normalmente la bahía y el puerto de Málaga, "au plein air", costumbre que aprendió de su maestro Carlos de Haes, y que revolucionó el cuadro de paisaje, dándole una frescura y un dinamismo inédito hasta entonces.
Esta es su obra más conocida, y una de las pocas en las que introduce un elemento narrativo, el naufragio, muy del gusto romántico tanto en el tema como en su tratamiento, dentro de una obra que, en su conjunto, habla habitualmente de un mar tranquilo en cuyas costas faenan barcas de pesca o donde grandes naves atracadas en el puerto dan cuenta de la actividad comercial propia de la Málaga del momento. En el centro de la composición se debate la barca, verdadera protagonista del cuadro, habiendo conseguido realizar Ocón un estudio de los rostros de los marineros, que denotan cansancio, abatimiento y, al mismo tiempo, una angustiosa esperanza ante la cercanía de tierra, aunque sin saber si podrán sobrevivir a las últimas olas que los separan de la playa. El mar embravecido y el tormentoso cielo los acomete con pincelada libre, viva, primando el color frente a la línea, al dibujo, abordando directamente el lienzo con el pincel, y utilizando un colorido claro y fresco, consiguiendo con todo ello dar soltura y realidad a la composición y a la naturaleza que refleja.