Las Colecciones
El actual Museo de Huelva se constituye sobre un edificio de nueva planta que cuenta con una superficie útil de 3.000 m² repartidos en tres plantas y un semisótano. Al igual que ocurre con otros museos de sus mismas características, su contenido se estructuró inicialmente en tres secciones: Arqueología, Bellas Artes y Etnografía. Esta última sección nunca estuvo en realidad instalada en el museo, ya que el Estado crea en 1971 el "Museo de Artes y Costumbres Populares de Aracena" como sección etnográfica del Museo de Huelva, en un intento por dotar a la provincia de cierta infraestructura cultural. Un sinfín de despropósitos obligaron a su cierre entrada ya la década de los 80, trasladándose la mayor parte de sus fondos al Museo de Artes y Costumbres Populares de Sevilla. Para paliar esta ausencia, se promueven desde el museo exposiciones de carácter temporal, en un intento por mantener vivo el entendimiento, conservación y difusión del rico patrimonio cultural de nuestra provincia.
La Sección de Arqueología se establece sobre una superficie aproximada de 950 m², divididos en una sala para la exposición permanente de aproximadamente 300 m² y un fondo o depósito en ocasiones visitable. Sustentada sobre el rico pasado histórico de la provincia, destacan entre sus colecciones los elementos procedentes del los conjuntos dolménicos de La Zarcita y El Pozuelo, los ricos ajuares de la necrópolis orientalizante de La Joya, los materiales de origen fenicio y griego documentados en las excavaciones urbanas de la capital, y los objetos cerámicos y metálicos que constatan el alto desarrollo alcanzado por la cultura tartésica a través del beneficio minero-metalúrgico de las minas onubenses, con yacimientos tan importantes como Tejada la Vieja (Escacena del Campo) o Niebla.
Resulta de particular interés la colección de materiales mineros de época romana procedentes de Riotinto, con piezas tan singulares como la rueda hidráulica presente en el vestíbulo de acceso al museo. Esta noria de canjilones, que servía para la evacuación de las aguas del interior de las minas, evidencia los logros tecnológicos alcanzados durante el periodo romano. También muestra la labor de recuperación y difusión patrimonial ejercida por las instituciones culturales andaluzas, con ejemplos tan evidentes como la reciente restauración de este ingenio hidráulico, único conservado completo en España y uno de los escasos exponentes existentes en el mundo.
Ocupando una superficie aproximada de 650 m², la sección de Bellas Artes se distribuye en cuatro salas expositivas y un área de reserva, todo ello ubicado en la primera planta del edificio. Tras la inauguración del museo, la colección se acrecienta mediante depósitos procedentes del Museo de Bellas Artes de Sevilla y el Museo Español de Arte Contemporáneo (MEAC), hoy Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS). Con el transcurso de los años, nuestro fondo pictórico se ha visto aumentado también con la incorporación de obras provenientes tanto del marco institucional como de donaciones particulares. Destacan dos conjuntos expuestos de manera casi permanente:
Vázquez Díaz
La obra del pintor nervense Daniel Vázquez Díaz, conjunto constituido por un importante depósito que hiciera el MEAC en 1973, posteriormente acrecentado mediante compra por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Podemos hacer mención a la obra "Muerte de un torero", en la que, además de mostrar toda su fuerza plástica, el pintor realiza un homenaje a su pueblo natal retratando en el lienzo a alguno de sus conciudadanos.
Plástica onubense
El conjunto que recoge la historia de la plástica onubense, desde los alumnos de la antigua Escuela de Bellas Artes de principios del siglo XX hasta la actualidad. Destacan las obras de José Caballero, la mayoría adquiridas recientemente por la Junta de Andalucía y alguna, como "Premonición del verano", donada por un particular; y las donaciones de artistas locales como Mateo Orduña Castellanos, Granado Valdés, Castro Crespo, José María Franco o Juan Manuel Vidal entre otros.
La Sección de Arqueología se establece sobre una superficie aproximada de 950 m², divididos en una sala para la exposición permanente de aproximadamente 300 m² y un fondo o depósito en ocasiones visitable. Sustentada sobre el rico pasado histórico de la provincia, destacan entre sus colecciones los elementos procedentes del los conjuntos dolménicos de La Zarcita y El Pozuelo, los ricos ajuares de la necrópolis orientalizante de La Joya, los materiales de origen fenicio y griego documentados en las excavaciones urbanas de la capital, y los objetos cerámicos y metálicos que constatan el alto desarrollo alcanzado por la cultura tartésica a través del beneficio minero-metalúrgico de las minas onubenses, con yacimientos tan importantes como Tejada la Vieja (Escacena del Campo) o Niebla.
Resulta de particular interés la colección de materiales mineros de época romana procedentes de Riotinto, con piezas tan singulares como la rueda hidráulica presente en el vestíbulo de acceso al museo. Esta noria de canjilones, que servía para la evacuación de las aguas del interior de las minas, evidencia los logros tecnológicos alcanzados durante el periodo romano. También muestra la labor de recuperación y difusión patrimonial ejercida por las instituciones culturales andaluzas, con ejemplos tan evidentes como la reciente restauración de este ingenio hidráulico, único conservado completo en España y uno de los escasos exponentes existentes en el mundo.
Ocupando una superficie aproximada de 650 m², la sección de Bellas Artes se distribuye en cuatro salas expositivas y un área de reserva, todo ello ubicado en la primera planta del edificio. Tras la inauguración del museo, la colección se acrecienta mediante depósitos procedentes del Museo de Bellas Artes de Sevilla y el Museo Español de Arte Contemporáneo (MEAC), hoy Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS). Con el transcurso de los años, nuestro fondo pictórico se ha visto aumentado también con la incorporación de obras provenientes tanto del marco institucional como de donaciones particulares. Destacan dos conjuntos expuestos de manera casi permanente:
Vázquez Díaz
La obra del pintor nervense Daniel Vázquez Díaz, conjunto constituido por un importante depósito que hiciera el MEAC en 1973, posteriormente acrecentado mediante compra por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía. Podemos hacer mención a la obra "Muerte de un torero", en la que, además de mostrar toda su fuerza plástica, el pintor realiza un homenaje a su pueblo natal retratando en el lienzo a alguno de sus conciudadanos.
Plástica onubense
El conjunto que recoge la historia de la plástica onubense, desde los alumnos de la antigua Escuela de Bellas Artes de principios del siglo XX hasta la actualidad. Destacan las obras de José Caballero, la mayoría adquiridas recientemente por la Junta de Andalucía y alguna, como "Premonición del verano", donada por un particular; y las donaciones de artistas locales como Mateo Orduña Castellanos, Granado Valdés, Castro Crespo, José María Franco o Juan Manuel Vidal entre otros.