Cosmética onubense. Una mirada al tocador femenino romano desde el Museo de Huelva por Ana Isabel Heredia López y Salvador Delgado Aguilar.

El engalanarse y perfumarse fue, para los romanos, tan cotidiano como lo es para nosotros hoy día. Sombra de ojos, delineador, coloretes guardados con esmero en pequeñas cajitas de tocador junto a nuestro inseparable espejo, aparecían también en el tocador de la dama romana, aplicados con esmero con espátulas de maquillaje y otros enseres. Y, para finalizar, un poco de perfume de especias exóticas traídas del lejano Oriente...

La cosmética y la belleza en el mundo romano es un tema atrayente y, desde la mirada histórica y arqueológica, un nicho abierto repleto de datos que ahondan en aspectos diversos, desde la propia economía (que implica un comercio de especias de alto valor en el mercado y, por ende, convertían los productos acabados en un elemento de lujo difícilmente accesible por el pueblo) hasta la sociedad (pues las implicaciones relativas a la belleza y al cuidado personal variaban entre pobres y ricos, entre mujeres y hombres), pasando, incluso, por la religión (la quema de esencias, los aromas, eran de vital importancia dentro de los rituales sacros).

Así, siguiendo los elementos que podemos encontrarnos en las vitrinas del Museo de Huelva (pinzas de depilar, ungüentarios, removedores de perfumes), viajaremos al pasado romano, para conocer cómo se presentaban diariamente a la sociedad en materia de belleza.