Entre los vestigios de la antigua Itálica se encuentra un nutrido grupo de esculturas imperiales entre las que sobresale el así llamado ¿Trajano de Itálica¿, una de las imágenes más emblemáticas del emperador heroizado. Trabajado en un bloque de Paros de más de dos metros de altura, presenta un esmerado modelado que le confiere su aspecto de vigor. Su modelo directo debió de ser la estatua del propio emperador que coronó la Columna de Trajano en Roma, como pueden corroborar las monedas de la misma época. Para descargar el resumen de la conferencia, pinchar aquí. (PDF Nueva Ventana 242 Kb)