En 1962 se inauguraba el Museo Arqueológico de Córdoba en el Palacio de los Páez de Castillejo, enclavado en el centro histórico de Córdoba. Actualmente se encuentra en un proceso de transformación siendo visitables únicamente los patios I y II. El palacio se configura como tal en el siglo XVI, gracias a la intervención del arquitecto Hernán Ruiz II, quien lo dota de la portada y escalera monumentales. Tras varios avatares históricos y ampliaciones, será Félix Hernández quien transforme todo el espacio del palacio para su uso museístico en la década de 1950, adquiriendo la imagen actual.